Tipos de invernadero con Agropinos

Un invernadero se puede clasificar según los materiales de los cuales se compone, entre los cuales se encuentran las mallas para invernadero.

Aunque los invernaderos son estructuras de diversas formas y tamaóos que tienen la capacidad de generar en un ambiente controlado, condiciones ideales de humedad y temperatura soportadas bajo los sistemas de riego en pro de lograr una producción de la mejor calidad.

En los invernaderos es muy común utilizar polisombras, aquella herramienta utilizada a su vez en la agricultura para que actúe como barrera cortavientos, delimitando áreas y protegiendo todos los cultivos y los galpones.

No debe olvidar antes de clasificar los invernaderos a las geomembranas, las cuales según su ubicación, permiten el correcto manejo de fluidos dentro de todo el recinto, compuestas de polímeros relativamente delgados permiten realizar canales artificiales, así como rellenos de recolección.

Clases de invernaderos:

Invernadero Túnel: Aquella estructura que supera los 2,75-3 metros cuadrados con una anchura variable, la cual tiene como principal característica una alta resistencia a los vientos y el uso a su vez tanques de almacenamiento de agua.

Invernadero tipo Capilla: Una de las estructuras más antiguas, empleadas en el forzado de cultivos, cuenta con una importante ventilación y una construcción de mediana a baja complejidad. De esa manera se aprovecha la utilización de materiales entre los cuales se pueden incluir las bolsas para banano y otros elementos para de bajo costo.

Invernadero con techumbre curva: Inspirados en los invernaderos tipo túneles, los mismos permiten fácilmente ajustarse a diferentes alturas, aprovechando con esto la luz solar al máximo, permitiendo en el interior un excelente volumen al interior de la caja térmica, logrando una alta resistencia a los vientos.

Invernadero tipo venlo (holandés): Los invernaderos de esta clase generalmente utilizan paneles en los cuales se intenta optimizar el control de recogida del agua pluvial. Aunque una de sus desventajas es el alto costo, lo compensa en relación a su alto grado de control de las condiciones ambientales.